Modo de Empleo

Este blog no se lee de arriba a abajo,
No estás leyendo versos, sino cartas,
Stewart o Caronte, quien reparta
que ponga la etiqueta a su trabajo.

Así, primero clica en "etiquetas"
y tendrás las epístolas juntitas.
¿leer de carrerilla? ¡quita, quita!
un lío, un error craso, una puñeta.

Ya ves, este es un blog con instucciones
de uso, síguelas, no es tan complejo,
tampoco hay que agitar antes de usar.

El tema es divertirse, ¡qué cojones!
si pasas y al salir estás perplejo,
ya sabes, tu deber es opinar.

sábado, 26 de febrero de 2011

Calypso

La reina de los náufragos sin tierra
se adorna en el espejo de la orilla,
la espuma, blanca y triste, se arrodilla,
enfrente de esa diosa que le aterra.

Espera con paciencia alguna guerra
entre el viento y el mar, y se maquilla,
soñando que su cuerpo eterno brilla
quizás más que el amor que en él encierra.

Se asoma ya al balcón de la marea,
guardando su pasión mientras desea
que un nuevo Ulises llegue hasta su arena

¿Qué humano atracará entre sus dos playas
perdiendo la razón y las batallas,
hundiéndose en su piel sin ver su pena?

Calibra con cuidado tu deseo

Calypso yo no soy otro Odiseo,
el hombre que aquí ves no es quien tú crees,
cuando hagas realidad lo que desees
calibra con cuidado tu deseo.

Arribo a tus orillas donde Heracles
abrió en un arrebato los pilares,
Calypso, ya tus juegos malabares,
no envuelven mi razón en tu debacle.

A este mar, a tu mar, a tu marea,
y al viento que tus lágrimas orea
le debo esta manera de estar vivo.

Acepto azules y rechazo grises,
lo siento pero yo no soy Ulises,
mi canto es este y es definitivo.

Calypso llora

Calypso llora sola, Ulises goza,
Calypso espera, Ulises vuelve a casa,
del fuego que encendió queda la brasa
oculta en esa diosa que solloza.

"Si vienes a quererme, ven y roza
el cuerpo que te ofrezco, ven y pasa"
el trémulo latido se acompasa
a la suave sonrisa que ella esboza.

Calypso tiene miedo y no se olvida,
Ulises es un bárbaro insensato
curtido en enfrentarse con los dioses.

Calypso le salvó al galán la vida
le quiso, mas Ulises fue un ingrato,
y la dejó llorando sus adioses.

martes, 22 de febrero de 2011

Mis cineastas

Jack Nicholson, Bruce Willis, Al Pacino,
Sigourney, Demi, Basinger, Jolie,
Brad Pitt, Tom Hanks, John Malkovich, Bruce Lee,
Polanski, Hitchcock, Burton, Tarantino.

Matt Damon, Will Smith, Neil Patrick-Harris,
Halle Berry, Marlon Brando, Morgan Freeman
Meg Ryan, Portman, Hopkins, Nielsen, Kidman,
Mark Wahlberg, Seymour Hoffman y Jim Carrey,

Heath Ledger, Edward Norton, Johnny Deep,
la Jóvovich, la Barrymore, la Streep,
Sean Connery, Adrien Brody, Jackie Chan,

Segura, De la Iglesia, Carlos Saura,
Belén Rueda, la Morgan, Carmen Maura,
Bardem, Alterio, Luppi, Alberto Ammán.

Soy un tanto iconoclasta

Joder, Caronte, chico, qué manía
de andar haciendo listas en soneto,
si veo otro inventario, te prometo,
cortarte de raiz cualquier porfía.

Solemnemente juro que ese día,
a riesgo de quedar como un paleto,
haré lo que me pide el esqueleto,
cambiar de tema así, con alegría.

Pero en esta ocasión tus cineastas
me traen al cerebro tantos nombres
que no va a tener fin este inventario

Ya sabes soy un tanto iconoclasta,
cuando leas mi lista no te asombres:
Rogelia, Roquefeler y Macario.

Cine del bueno

Ya sabes que no escribo lo que quiero
que soy tan solo el "negro" de mis musas,
que a veces son voraces y confusas,
y a veces, simplemente, las tolero.

mas iba siendo la hora, compañero
de hacerle un homenaje sin excusas
al cine, y escapar de las pelusas
que me secan la tinta en el tintero.

Y quedan muchos más por darle loores,
Pajares más Esteso más Ozores,
¡Carajo eso sí que es cine del bueno!

y qué ma va a importar cambiar el tono
Ni te pido perdón ni te perdono,
Nada hay por perdonar, ¡Toma Moreno!

Yo y mi ego

En fin, Victoria Abril, Pastora Vega,
Antonio de la Torre, Lluis Homar,
¿Bardén? Javier y Carlos y Pilar,
Alex Angulo, Eduardo Noriega.

Ernesto Alterio, Héctor, María Isbert,
Alex O´Dogherty, Silvia Abascal,
Natalia Verbeke, Paco Rabal,
Pilar López de Ayala, Nuria Espert.

Terele Pávez, Silke, Lola Dueñas
Raúl Arévalo, Candela Peña,
Lluvia Rojo, Ingrid Rubio, Juan Diego.

Nawja Nimri, Bebe, Marta Etura,
Ya no recuerdo más a estas alturas...
Aquí mis cineastas... yo y mi ego...

Falta Luis Tósar

Pastora... ¡Cómo no! menudo error,
no hallaba quien rimase con Noriega,
tan sólo el par de tetas de Paz Vega,
(bendito HD del televisor).

Menuda lista, buen cine de autor,
tan sólo falta Luis Tósar, colega
ahora que está tan cerca la entrega
del Premio Goya al mejor actor.

¿Quién más puede rimar? ¿Quizás Pataky?
Lo admito, no es Mae West ni la Dukakis
¿Tal vez Kira Miró? ¿Eva Santolaria?

Si crees que no merecen tales ritos
diré que son mis cuerpos favoritos
tan solo por llevarte la contraria.

Nos olvidamos a un sinfín.


Te juro que lo puse, pero claro,
el soneto es un campo de batalla
y en el fragor de rimas y metralla,
se tachan genios grandes sin reparos.

Tosar cayó rendido de un disparo
de alguna musa pérfida y canalla,
Qué grande es Luis, Caronte, pero… vaya,
tampoco es que lo deje yo en el paro.

También falta Sean Penn, Karra Elejalde
Paul Newman y James Dean, Unax Ugalde,
Ya ves, no olvidamos a un sinfín.

Ed Harris, Woody Allen y John Wayne
Gary Oldman, Gene Hackman, Michael Caine,
Dustin Hoffman, Charles Chaplin, Errol Flynn...

viernes, 18 de febrero de 2011

Lo que soy

El "brother" de mi hermano, el enemigo
del niño inaguantable de mi espejo,
el que jamás me acepta ni un consejo,
el resto de la piel que va conmigo.

El sucio dandy, el centro de mi ombligo,
el viejo joven, el joven tan viejo
a quien le duele su propio reflejo,
el que volvió a soñar ayer contigo.

Es eso lo que soy, si tú te marchas,
el lirio al que le vencen las escarchas,
el loco que ha perdido cada guerra.

El último, el cobarde, el fugitivo,
el necio que si aún sigue estando vivo
es sólo por la muerte que le aterra.

El hueco en un espacio

El hueco en un espacio sin razones,
la ausencia más atroz y más canalla,
el hielo en el fragor de la batalla,
el ímpetu de alfiles y peones.

Un trozo de periódico mojado,
una carta marcada, un dado ciego,
la lucha del adiós y el hasta luego,
un trémulo diván desvencijado.

El viento resoplando en la arboleda,
los pájaros huyendo del sonido
que emite sin furor la campanada.

Ya sabes cuánto vale lo que queda
de mí cuando no estás, cuando te has ido,
sin ti ya nada valgo y todo es nada.

"Sintigo"

Me rompo en las esquinas de tu ausencia,
pasando otra noche en el agujero,
queriéndome abrigar del aguacero
de lágrimas de olvido y de violencia.

No tengo nada más que la evidencia
que lejos de ti soy menos que cero,
y tras vender mi vida por entero,
extraño antes que nada, tu presencia.

Sintigo soy el blues de un saxo mudo,
Sintigo estoy en el polo y desnudo,
Sintigo me hundiré en un mar de lodo.

Sintigo vivo en esta encrucijada:
Voy solo conmigo es decir, con nada
y sin ti a mi lado es decir, sin todo.

"Contú"

Para habitar la sombra de tu ombligo,
para poblar tus páramos salvajes,
para viajar oculto en tu equipaje,
para cortar la lana de tu abrigo.

Para salvar tu luz del enemigo,
para correr por todos tu paisajes,
para sentir la seda de tu traje.
para surcar tu fértil mar de trigo.

Para olvidar las sendas conocidas
y aplacar los impulsos homicidas
que vierte en tus ausencias Belcebú.

Por no representar las pesadillas,
por no buscarle al miedo las cosquillas
mejor que estar "sintigo", estar "contú".

Ni "sintigo" ni "contú"

Me duele que me duela este no verte,
saber que no me esperas en la cama
despierta y sin ponerte ni el pijama,
maldigo este pesar de no tenerte.

Sintigo te persigo hasta la muerte,
contú soy el esclavo de mi dama,
sintigo la tristeza me embalsama,
contú celebro yo mi mala suerte.

Contú me ahogo, sintigo no soy nada,
no valgo, soy tan insignificante
como un cero y tú el oro del Perú.

No sé tenerte cerca ni alejada,
ni sé cómo seguir hacia delante,
cariño, ni sintigo ni contú.

lunes, 14 de febrero de 2011

Ahora

Ahora que mi musa está callada,
ahora que no invierto en pesadillas,
ahora que descubro las cosquillas
de alma que tenía encarcelada.

Ahora que el dolor se queda en nada,
ahora que se funden las bombillas,
ahora que me postro de rodillas
delante del puñal de tu mirada.

Ahora que me mienten los espejos,
ahora que estás más cerca que lejos,
ahora que no sé lo que me digo.

Ahora que se enfrían los cafés,
ahora que te veo si me ves,
ahora que me siento aquí contigo.

Ahora tambien

Ahora que me siento aquí contigo,
ahora que no estás tan a mi lado,
ahora que el reloj tiene enconado
el tétrico mirar del enemigo.

Ahora que me escondes el abrigo,
ahora que el termómetro ha bajado,
ahora que el parchís no tiene dado
y el mar es un océano de trigo.

Ahora que el calor no tiene ganas,
ahora que no peino tantas canas,
ahora que está ardiendo la ciudad.

Ahora que deseas y deseo,
ahora que me mientes y te creo,
ahora que me amas sin piedad.

Más que ahora

Ahora que el infierno se deshace
ahora que hay un cielo entre sus manos,
ahora que no somos más que humanos, 
ahora que sé dónde el amor yace,

ahora que al fin tengo quien me abrace,
ahora que la veo hasta en los planos,
ahora que alfombramos los pantanos,
con pétalos de rosa kamikaze.

Ahora que hay un lirio en el florero,
que hasta el despertador es oportuno,
ahora que el olvido se evapora.

ahora que me quieren y yo quiero,
ahora que en vez de dos somos uno,
ahora que no existe más que ahora.

Ni ayer ni luego.


Ahora que no existe más que ahora,
Ahora que me alumbra más tu fuego,
Ahora que tu voz me sube el ego,
ahora que tu cuerpo me decora.

Ahora que tu boca me devora,
ahora que no existe ayer ni luego
ahora que la soledad doblego,
ahora que los años duran horas.

Ahora que me ocultas los detalles
ahora que me ahorras el mal trago
ahora que te alías con mi risa.

Ahora que el amor está en la calle,
ahora que me fijo en lo que hago,
ahora que la vida va sin prisa.

jueves, 10 de febrero de 2011

No sería yo

Sin este viento de pieles calladas,
sin estos besos con gusto a cianuro,
sin estas manchas de sangre en el muro,
sin esta agenda de puertas cerradas,

sin este mapa de las puñaladas,
sin estos versos de un viejo conjuro,
sin estas ganas de ser más oscuro,
sin estas luces de neón apagadas,

sin este hueco en un cine vacío,
sin estas noches de olvido y absenta,
sin este gris corazón dando voces,

sin estas páginas muertas de frío,
sin este absurdo cartel de "Alma en venta",
yo no sería el bufón que conoces.

El ser que has sido

Quizás el viento en las calladas pieles,
o el beso con olor a almendra amarga,
las pruebas del delito, sin adarga,
o la cerrada puerta en tus papeles.

O el mapa del camino de la daga,
quizá unas lineas mágicas y sacras,
las ganas de observar la oscura lacra
del tiempo y el neón que se te apaga.

O el espacio en el patio de butacas,
o el futuro cargado de resacas,
o un corazón sacándose alfileres

Tal vez unas palabras ateridas,
o un alma, por supuesto, mal vendida,
te hacen ser el ser que has sido y eres.

Lo que soy es lo que tengo

Seguro, lo que soy es lo que tengo,
mi trágico inventario de derrotas,
en contra del mayor de los idiotas,
el hombre con el traje gris marengo.

No sé adónde voy ni de dónde vengo,
la lluvia que me empapa con sus gotas
el barro entre las suelas de mis botas,
me roba mi pasado y mi abolengo.

Quizás si me desvisto de lo nimio,
y vuelvo a mis orígenes, al simio,
descubra lo que yo soy realmente

No obstante, se me agarran a la piel,
los fríos de esta habitación de hotel
en donde yo me oculto de la gente.

Serás eterno y grande


Si intentas alcanzar mayores cotas
y al fin tu intento resulta fallido,
no dejes vislumbrar que te has rendido,
por ese hueco pasa la derrota.

Así mientras tus frías manos  frotas
pensando cómo te alcanzó el olvido,
verás que tu cadáver te ha vencido
y al fin la muerte te quitó las botas.

Entonces, en la muerte, en ese instante
serás tan sólo aquello que poseas,
procura no esperarla de vacío.

Ha de llegar el día, pero antes
debes creer en ti, y cuando creas,
serás eterno y grande, amigo mío.

domingo, 6 de febrero de 2011

Sin razón ni condiciones

Esto de andar sembrando decepciones
es más cansado de lo que parece,
cuesta seguir si siempre es martes trece,
si se pone a llover en vacaciones,

Este vivir pidiendo explicaciones
de cómo y de porqué ya me enloquece,
cuesta seguir sin más cuando se cuece
un luto sin razón ni condiciones.

Quizá resulte que metí la pata,
lo admito, puede ser que sea mi falta
y tengas tú razón, y yo la pierda.

Pero tal vez seas tú quien se maltrata.
Qué dura es la verdad cuando te asalta.
A veces la verdad es una mierda.

La verdad es la coartada

Qué mierda es la verdad, dijo Pinocho,
qué hermosa una mentira bien contada,
lo dijo un charlatán sin decir nada
pintándome el ardid del tocomocho.

Por eso, si me invento que trasnocho
me paso noches sin tocar la almohada,
a veces la verdad es la coartada
que inventan los mayores de dieciocho.

Por eso yo te voy a ser sincero,
ni tanto, ni tan calvo, ni melenas,
no existen la verdad ni la mentira.

Ya sabes que hasta el tono, compañero,
del néctar que me corre por las venas
depende del cristal con que se mira.

La duda gana


Lo cierto es que lo cierto tiene a veces,
oculto entre sus ramas un veneno,
que arrasa cruel, apático y obsceno.
lo cierto es que lo cierto se aborrece.

Lo cierto es que cuanto prevalece,
contiene una verdad o vive ajeno,
o carga con la pena que almaceno.
Lo cierto es que lo cierto me enfurece.

La duda entre verdad y pantomima
no tiene más que un claro vencedor,
La duda gana, ni verdad, ni engaño.

Lo cierto es que lo cierto no me anima,
¿será que la verdad da más pavor?
¿será que la mentira hace más daño?

No estamos preparados

La infiel mentira no hace nunca daño,
la vil felicidad es la ignorancia,
lo que es cierto carece de importancia
vivimos todos juntos del engaño.

Por eso es que lo cierto es tan extraño,
Por eso es que hay mentira en abundancia.
y somos tan felices en la infancia
sin nunca cuestionarnos al rebaño.

Lo malo es que a medida que crecemos
nos vamos convirtiendo en más blasfemos,
queriendo conocer la cruel verdad.

Lo cierto es que no estamos preparados,
lo dijo un actor de los aclamados,
con traje de tirano en crueldad.

A veces entran ganas


A veces entran ganas, no lo niego
de entrar a ciegas en la oscura cueva,
de cerrar el corazón a cualquier prueba
que dé razón de ser al propio ego.

A veces entran ganas de estar ciego
de no saber si llueve aunque te llueva,
de estar desinformado cual ameba,
de ser feliz ahora y pensar luego.

Mas, ¡ay! del insensato que se ocupa
de andar midiendo escalas con la lupa
del más abyecto y lúgubre deseo.

Tal vez el insensato halle belleza
en esa esquiva faz de la certeza
que araña y mortifica el pie del reo.