Seis metros bajo tierra ennegrecida
cansado de las cruces de estar muerto,
despego al fin los párpados, despierto,
me siento otra vez vivo, mas sin vida.
Rehén en un vil nicho sin salida,
buscando algún resquicio medio abierto
para al menos firmar en el desierto
la lápida cruel que me lapida.
Que vivo estoy y nadie oye mi grito
Que vivo estoy, convicto del silencio.
Que vivo estoy, sufriendo cada herida.
Y bramo una vez más "Te necesito",
blasfemo, lloro, no callo, sentencio:
que vivo estoy, viviendo una no-vida
Modo de Empleo
Este blog no se lee de arriba a abajo,
No estás leyendo versos, sino cartas,
Stewart o Caronte, quien reparta
que ponga la etiqueta a su trabajo.
Así, primero clica en "etiquetas"
y tendrás las epístolas juntitas.
¿leer de carrerilla? ¡quita, quita!
un lío, un error craso, una puñeta.
Ya ves, este es un blog con instucciones
de uso, síguelas, no es tan complejo,
tampoco hay que agitar antes de usar.
El tema es divertirse, ¡qué cojones!
si pasas y al salir estás perplejo,
ya sabes, tu deber es opinar.
No estás leyendo versos, sino cartas,
Stewart o Caronte, quien reparta
que ponga la etiqueta a su trabajo.
Así, primero clica en "etiquetas"
y tendrás las epístolas juntitas.
¿leer de carrerilla? ¡quita, quita!
un lío, un error craso, una puñeta.
Ya ves, este es un blog con instucciones
de uso, síguelas, no es tan complejo,
tampoco hay que agitar antes de usar.
El tema es divertirse, ¡qué cojones!
si pasas y al salir estás perplejo,
ya sabes, tu deber es opinar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario